domingo, 27 de enero de 2013

Nuevo logro de la democracia burguesa española – 6 millones de parados


Según el dato aportado por laEncuesta de Población Activa(EPA), en el último trimestre de 2012 el número de personas desechadas por el sistema económico capitalista de España ha aumentado en 691.700 personas.
Con eso, el régimen bate un nuevo récord histórico de crímenes contra el pueblo, al no cumplir con su obligación de asegurar el cumplimiento de uno de los derechos humanos básicos, como es el derecho al trabajo, y posicionándose definitivamente como un régimen violador de la Declaración Universal de los Derechos Humanos de la ONU y de la propia Constitución del país.
1.833.700 familias tienen a todos sus miembros en paro, un 16,4% más que en 2012.
Los desmanes de la burguesía han sido agravados por las políticas del gobierno del franquista Partido Popular que potenció el proceso natural del capitalismo de destrucción de la dignidad de la clase trabajadora con una criminal reforma laboral que, siguiendo la dirección marcada por el anterior gobierno de Rodríguez Zapatero, supuso la perdida de trabajo para 850.000 personas y un aumento del número de parados en 691.700 personas. (La diferencia entre los dos números, corresponde a los trabajadores que han tenido que abandonar el país bien por falta de trabajo, bien por la persecución del régimen).
Por otra parte, Eurostat ha asegurado que el número de los parados en España asciende a 6.067.000 personas.
No se aprecia posibilidad alguna de solucionar los problemas de la gente a través del caduco sistema capitalista. Incluso los analistas burgueses aseguran que de recuperarse la economía capitalista no se puede esperar que en España comience la creación de empleo hasta dentro de 5 años. Y de finalizar la crisis y volver al crecimiento, no se puede esperar la recuperación completa hasta dentro de 25 años.
Sociólogos apuntan que se trata de demasiado tiempo y de varias generaciones perdidas. Por otra parte, supondría seguir confiando en los mismos poderes que arruinaron la vida de millones de personas.
Algunos movimientos sociales y sindicalistas comienzan a hablar de la necesidad de una Huelga General Política e Indefinida para exigir el desmantelamiento del sistema y el comienzo de la construcción de un sistema socio-económico nuevo, basado en lo público y en las nuevas reglas de distribución de la riqueza del país.
Ya no se trata de nosotros ni de nuestro hijos. La vida de nuestro nietos está en peligro. Es hora de liquidar a la burguesía como clase y comenzar a construir un país nuevo. No podemos dejar nuestro futuro en sus manos“,- dijo a Octubre un destacado sindicalista de Barcelona pidiendo que, debido a la escalada represiva del régimen, no se revelara su nombre.

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